Estados mentales

Conectada en el messenger, esperando que alguien aparezca y puedas hablar, aguardando ilusiones o esperando decepciones, comienzas a leer el sinfín de frases que la gente tiene escritas, imaginando el estado de ánimo de cada uno de ellos o el motivo de ese conjunto de letras. La interpretación, por supuesto, dependerá también del estado del lector, que en muchas ocasiones, la empatía con la persona o la localización de la cabeza de la otra, hacen volar la imaginación.
Leyendo hoy esos miles de estados mentales, me he parado en uno que encabezaba la dirección de una querida amiga:"... de pequeña siempre quise ser como la barbie ... poder también sacarme la cabeza de los hombros...". No puedo estar más de acuerdo con esta afirmación. Habría días que dejaría mi cuerpo pasear, abandonando la cabeza en casa, olvidando todo lo que por ella, que bonito sería el mundo así, ¿o no?
La suerte o desgracia del ser humano es que somos seres conscientes y que inevitablemente, la cabeza (y todo lo que eso conlleva) está ahi. También es bonito sentarte junto al mar y sentir su tranquilidad u oler un cojín y recordar quién estuvo acostado contigo... Querida amiga, la solución fácil sería ser como la barbie, la díficil es ser persona, seguir viviendo.
No comentaré ninguna frase más, que por haberlas hailas.